El inicio. Uno de tantos



Originalmente este texto es del 26 de Febrero del 2017


A veces uno sabe que está hecho para hacer cosas hermosas en el mundo y no poh está haciendo cosas que, como decirlo, son nada.
Por ejemplo lo que hago y debería hacer…

Soy maquilladora hace muuuuucho tiempo y ahora estoy terminando mi curso de peluquería y na poh, estoy perdiendo el tiempo siendo recepcionista en las mañana. No quiero decir que ser recepcionista sea malo, simplemente no es lo mío.

Valoro ene la pega, porque hay que tener el útero bien puesto para sonreírle a cada weón que pasa por el hall tirando alguna talla fome… y no son pocos los que lo hacen.

En fin, lo soporto porque como digo yo: “es una pega que me financia el arriendo”
Es por eso que mi vida comienza (comenzaba) después de las 13 pm. Te cuento un poco.

En el mundo me dicen Nan… porque cuando era chica mi tía Pasión (si, así se llama) me decía Nanda. Se modificó un poco gracias a mi amigo Sauce y me encanta, lo encuentro súper femenino y la verdad ya es mío.
Tengo 31 años, 1 hijo de 13 años (cheque a fecha)  y 1 marido que son lo máximo. Soy bailarina y coreógrafa de profesión y ejercí súper poco después de mi vida universitaria, pero comencé en los escenarios como a los 3 años  cuando mi mamá me llevo al municipal a estudiar danza clásica.
Mientras estaba ahí decidí que quería ser bailarina toda mi vida. Entre a la academia de la Karen Connolly para sacar el título de bailarina y después al Bafochi (la mejor experiencia de mi vida, 15 años de amor).

Cuando llego la hora de la universidad, iba a estudiar Arquitectura y estaba a punto de matricularme, cuando mi viejo me dijo que en X universidad estaban impartiendo la carrera de coreografía. Él pensaba que tenía que ser feliz, antes de estudiar algo solo por plata. (La verdad es que mis viejos son lo máximo! Ellos siempre nos han mostrado que más vale ser feliz que morir cegado por alcanzar algo que no te completará). Como dice mi mamá: “vinimos al mundo a ser felices”


Cuando fui a conocer la universidad, fue OTRA WEA!!! Habían bailarines en los pasillos, elongando bailando, me sentía como en una película tipo Step Up! (carnet al suelo) fue hermoso!
Estando en la carrera tuve un ramo de maquillaje teatral y se me dio. Tenía ene manejo de las brochas de maquillaje y estaba familiarizada con los implementos, como que venía con el chip de maquilladora instalado porque fue súper  fácil aprender las técnicas. Lo amé, lo amé tanto que me llegó a dar miedo pensar que estaba estudiando algo equivocado…

Terminé mi carrera y me dedique a bailar y dar clases un tiempo para luego comenzar a trabajar en distintas cosas que me permitieran estar con mi hijo y combinarlo con lo que amaba, bailar.
Trabajé en miles de lugares; lavando platos, de secretaria, telefonista, cajera, mesera, promotora, en la tele (jajaja) hasta que llegue al trabajo donde conocí a mi marido.

Pralad es fotógrafo, y necesitaba que alguien maquillara a sus modelos para las sesiones, por lo que me atreví a tomar unos cuantos maquillajes y comenzar a jugar con lo que sabía.
Y me picó el bichito nuevamente. Decidí estudiar maquillaje y me contacté con Cándida, mi profe. De ella aprendí  ene, sobre todo de productos y accesorios que ni idea que existían.
Pero lo más importante, aprendí a atreverme y a no tener miedo a crear. Y es que tengo la cabeza siempre llena de colores y era súper difícil para mí mostrarlos, por miedo a que a la gente no le gustara o no sé,  miedo nada más.

Uno nunca es lo suficientemente bueno para gustarle a todo el mundo, pero día a día trato de ser lo suficientemente buena para gustarme a mí.
En fin, hoy estoy aquí, escribiéndote por primera vez, sobre mí y sobre lo que me pasa. De las cosas que veo, pero principalmente de lo que amo, el maquillaje.  Tratare de escribir siempre con la mayor sinceridad

Además podrás ver las fotos que subo con los maquillajes que he creado y ejecutado y uno que otro video.

Espero te guste y nos volvamos a leer
















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